SaaS frente a proveedor de servicios administrados (MSP)
También existe cierta confusión en torno a las líneas que separan los modelos de SaaS y de proveedor de servicios administrados (MSP). Si observamos un modelo de MSP, puede parecer que tiene algunos objetivos similares a los del modelo de SaaS.
Sin embargo, si profundizamos un poco más en el modelo de MSP, comprobaremos que MSP y SaaS son en realidad diferentes. El siguiente diagrama proporciona una vista conceptual de un entorno MSP.
Este diagrama representa un enfoque del modelo de MSP. A la izquierda, se muestran los clientes que utilizan el modelo de MSP. En general, el enfoque en este caso consistiría en utilizar la automatización disponible para aprovisionar el entorno de cada cliente e instalar el software para ese cliente.
A la derecha se muestra el esquema operativo que el MSP utilizaría para dar soporte a estos entornos de clientes.
Es importante tener en cuenta que el MSP suele instalar y administrar una versión del producto que un cliente determinado desea ejecutar. Es posible que todos los clientes utilicen la misma versión, pero esto no suele ser necesario en un modelo de MSP.
La estrategia general consiste en simplificar la vida del proveedor de software al hacerse cargo de la instalación y la administración de estos entornos. Si bien esto simplifica el trabajo del proveedor, no se relaciona directamente con los valores y planteamientos que son esenciales para una oferta de SaaS.
El objetivo es liberarse de la responsabilidad de la administración. Hacer esa transición no es simplemente conseguir que todos los clientes utilicen la misma versión con una experiencia única y unificada de administración y operaciones. Por el contrario, MSP suele permitir versiones independientes y suele tratar cada uno de estos entornos como sistemas con funcionamientos separados.
Sin duda hay áreas en las que el modelo de MSP podría empezar a solaparse con el de SaaS. Si el MSP básicamente requiriese que todos los clientes ejecutaran la misma versión y pudiera incorporar, administrar, controlar y facturar a todos los inquilinos de forma centralizada a través de una sola experiencia, podría empezar a ser más SaaS que MSP.
La cuestión general es que automatizar la instalación de los entornos no es lo mismo que tener un entorno SaaS. Solo si se agregan todas las demás advertencias abordadas anteriormente, este modelo será auténticamente SaaS.
Si nos alejamos de los aspectos tecnológicos y operativos, la línea que separa los modelos de MSP y SaaS se hace aún más clara. En general, como empresa de SaaS, el éxito de su oferta depende de su capacidad para implicarse profundamente en todos los componentes de la experiencia.
Por lo general, esto significa estar al tanto de la experiencia de incorporación, comprender cómo afectan los eventos operativos a los inquilinos, hacer un seguimiento de las métricas y los análisis clave y estar cerca del cliente. En un modelo de MSP, donde todo esto se transfiere a otra persona, es posible que acabe perdiéndose los detalles clave que son fundamentales para controlar una empresa SaaS.